Y qué si al despertar una mañana, todas las autopistas y calles del mundo hubiesen sido bloqueadas, el tránsito desviado y todos los carros del mundo tuviesen que pasar por la puerta de mi casa. Ir a la escuela sería un infierno, papá no podría sacar su auto del garaje y gritaría groserías a todos los conductores parqueados a su espalda: chinos, árabes, rusos, irakies y africanos; todos mirarían consternados a mi papá, seguro no entenderían lo que les dice. El policia de tránsito estaría desconcertado, creo que nunca antes habria visto una cola tan larga de vehículos en el vecindario, todos tocando sus bocinas para que les cedan el paso, preocupados porque van a llegar tarde a sus trabajos, y mi papá gritándoles que avancen para poder sacar el carro de la cochera, y yo que voy a llegar tarde a la escuela y me imagino a mi maestra regañándome por ello...